Caminar erecto por la vida

MAYO 8


Dios al hombre lo hizo erecto, cuando mira hacia arriba; sólo el bruto animal tiene inclinada su cabeza hacia la tierra.

A veces te olvidas de esto y te arrastras por la tierra llevado por tus instintos; te arrastras empujado por tus inclinaciones; te arrastras sin horizontes y sin alturas.

Otras veces te dejas arrastrar por los demás; por los que tú juzgas más avivados que tú, más entendidos en las cosas del mundo y de la vida que tú, por los que ves que triunfan con triunfos más visibles y beneficioso; te dejas seducir por los que tienen más arrastre que tú, sin pensar si ese arrastre es para el bien o para el mal.

No debes dejarte arrastrar; has de caminar erecto, con un ideal bien claro y bien fijo, que oriente todas tus acciones y sea la explicación de todos tus móviles; siempre hacia arriba y siempre con deseo de mejoramiento, de propia superación.




"Renunciando a la impiedad y a las pasiones mundanas, 
vivamos con sensatez, justicia y piedad en el siglo presente,
 aguardando la feliz esperanza 
y la manifestación de la gloria del gran Dios y Salvador nuestro, Jesucristo"
(Tito, 2, 12-13)